A través de ver tanto y buen cine oriental, sobretodo coreano, he llegado a un momento en que, por un lado necesito ver cine europeo para sentirme asociada a mi propia historia, pero reconozco que la delicadeza y el refinamiento estético de Asia me cautivan y mi alma se deleita en ese mundo de la contemplación.
Ayer, sin embargo cuando vi AMOUR, la super película de Haneke, simplemente comprendí que es una cuestión individual.
Quisiera aprender a comportarme de manera que no me resulte desagradable ni a mi ni a los que me rodean.
El entorno no ayuda porque me he acostumbrado a hablar en un tono de voz que me molesta incluso a mi, hablo como si estuviera rodeada de sordos.
Por otro lado no soy discreta, no sé ni saludar ni despedirme, cosas que son tan fáciles de hacer con una ligera inclinación de cabeza....
Enfín, si os apetece ver buen cine orienta, yo simplemente os doy la fuente.
A partir de ahí ya puedes disfrutar de todo un mundo desconocido para nosotros y lleno de misterio, belleza y secretos.
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