Agustín Ibarrola fue mi profesor en BBAA cuando empezó la escuela provisionalmente instalada en el museo de arquelogía de Bilbao.
Agustín solo impartió un cursillo de varios meses, pero para mi fue importante ya que me reveló los secretos del constructivismo ruso en el que me he apoyado durante el resto de mi vida; de hecho, mis referencias artísticas desde un punto de vista intelectual empezaron a través de Ibarrola.Empecé a pintar cuadros abstractos conociendo la necesidad de que el aire corriera a través de las formas..
Ibarrola también nos enseñó el grabado con linoleum, técnica fácil y barata de sorprendentes resultados.
Respecto al bosque pintado de Oma, no sé qué decir.
No creo que los árboles estén contentos habiendo sido tan agredidos.
me gustaria verlo a pesar de lo agresivo que resulta para los pinos.
ResponderEliminarsiniestro
ResponderEliminarLa música, muy adecuada
ResponderEliminarEl resto, es lo que hay y la manera que Ibarrola ha sabido saborear ese bosque, es su manera, pienso que hay que tener conciencia y más cuando eres artista.
Tu al menos has sacado algo positivo de Ibarrola.
@mar seco:
ResponderEliminarNo sabía que estuvieras tan concienciada con el medio ambiente; la verdad es que estoy de acuerdo contigo.
También me dejó perpleja que Chillida quisiera lesinar el monte aquel en canary Islands