A medida que a través de Internet mis cartones son vistos por personas de todo el planeta, van adquiriendo cierto peso específico que da lugar a propuestas para analizarlos, estudiarlos y sacar conclusiones sobre su significado.
La última proposición que me ha hecho un escritor de arte es que le envíe dos libros en hojas sueltas (le mandaré fotos) porque solo quiere sentir la imágenes y él hará un profundo análisis que luego se incorporará al encuadernar el libro.
Me parece muy interesante que una persona que solo me conoce a través de mi trabajo, ponga tanto interés en mi obra.
Por otro lado, ya tengo encuadernados todos los libritos del proyecto Migraciones, que ha sido duro, quizás por ser la primera vez que me comprometo a hacer libros seriados, no es lo mismo que un grabado.
Ya solo me falta enviarlos a sus destinatarios.
Maite Sota, mi encuadernadora, ya me ha entregado el libro del Athletic.
Es una joya.
Pronto pdréis deleitaros en su contemplación.
Maite es una extraordinaria encuadernadora pop. Yo soy minimalista.
El trato que tenemos es muy simple:
Yo produzco las hojas de los libros y cuando doy por terminado mi trabajo, le entrego el material y ella hace lo que le da la gana.
No hay consenso ni palabrerías, ni discusiones.
Solo trabajo.
Y el resultado es magnífico.
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