No love, no friendship can cross the path of our destiny without leaving some mark on it forever (Francois Mauriac)
Agradezco a Marcela que me avisara con tiempo para hacerme a la idea de que iba a dejar este cuerpo.
Gracias a eso pude despedirme de ella, aunque en realidad detesto las despedidas de todo tipo.
He conocido tanto y tan profundamente a Marcela desde hace tantos años y admirado su creatividad, su bondad, su entusiasmo, su humor, su capacidad de trabajo, de entrega, de amor.
Marcela era una persona muy especial, de las que rompe la pana.
Desconocía los prejuicios y se saltaba a la torera todo tipo de conservadurismos pueblerinos, era cosmopolita por familia y por si misma.
Marcela creaba en todo momento y cuando triunfaba, se dedicaba a otra cosa.
La tienda de Bilbao de objetos de segunda mano sirvió de escenario para que los artistas pudieran utilizarla como el lugar perfecto para filmar películas, hacer fotos etc.
ARREBATO (nombre puesto en honor de la película de Iván Zulueta) trajo la modernidad a Bilbao.
Era como estar en Londres enfrente del Támesis, refugio de pintores, músicos, artistas, disfrutadores de la vida...
No digamos nada cuando Marcela estaba en el CAFE A GOGO de Neguri, la que se organizó.
No tengo palabras para explicar cómo una persona en un barcito chiquitín puede cambiar la mentalidad decimonónica de un pueblito victoriano.
Organizó exposiciones, conciertos, performances con los artistas mas avant garde del entorno.
Y ya cuando se decidió a montar el AMOR DE MADRE para que su hija tuviera una empresa propia, dio el dó de pecho y de la nada, surgió el sitio mas emblemático de Euskadi.
Reflejo en mis videos algunas de las fiestas a las que yo asistí.
Doy gracias a la vida por haber tenido la oportunidad de haber disfrutado de Marcela desde muy cerca pudiendole apreciar en, espero, toda su grandeza de alma.
El texto es precioso pero no entiendo lo del helicoptero
ResponderEliminarEs simbólico.
ResponderEliminar...uffff me acabo de enterar...conocía a Marcela del café a Gogó...no sabia q nos había dejado, manteníamos charletas mañaneras con el café, y despues le perdi la pista, pero q ha pasado? era muy joven! no me lo creo...!
ResponderEliminar@Carmen, no sé qué Carmen eres, tengo muchas Cármenes en mi vida.
ResponderEliminarPerdona q no me haya presentado, no nos conocemos personalmente, aunq conozco tu obra, trabajo en el dpto. de cultura y he llegado a tu blog de casualidad mientras rebuscábamos para un proyecto...yo vivo en arkotxa, fui vecina de Marcela, luego se fué y hacia años q no la veía, me quedé pegada al leer tu post, Marcela es la persona mas magnetica q he conocido, puro carisma.
ResponderEliminarCarmen Uriarte.
@Carmen, estoy de acuerdo contigo, era realmente especial.
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